En el marco del Programa de Regularización Dominial que lleva adelante la Municipalidad de Santa Fe, el intendente Juan Pablo Poletti visitó casa por casa y dialogó con los vecinos que recibieron las escrituras propietarias de sus hogares. Los ejes principales de este programa son: el valor social de la tierra para hacer efectivo el acceso a la titularidad del suelo urbanizado; gratuidad en todos los trámites del procedimiento; y creación de un fondo especial cuyo destino es costear los gastos de escrituración que demanda el programa.
Esta entrega de escrituras fue recibida con mucho agradecimiento por los adjudicatarios de los papeles que certifican y respaldan la legitimidad de la propiedad del terreno a sus respectivos dueños. “Es una verdadera alegría cuando se puede regularizar la situación dominial y dar la escritura a estos vecinos, que les devuelve el derecho de que cada ladrillo, cada sueño que habían construido hoy tengan su nombre”, resaltó Poletti. “Queremos garantizar un derecho para los vecinos, y sus caras de felicidad lo dicen todo”, agregó.
Las escrituras fueron entregadas puerta a puerta dentro de las manzanas delimitadas por calles Piedrabuena al sur, Furlong Cardiff al este, Carlos Leumann al norte, y Pedro Thomas de Larrechea al oeste.
Un milagro
Un programa con continuidad
El Plan de Regularización Dominial comenzó en el año 2009 cuando se relevaron más de 40 barrios de la ciudad que tenían asentamientos urbanos informales. Familias en situación de vulnerabilidad social y que viven en terrenos de jurisdicción del Estado tuvieron a partir de ese momento la posibilidad de incorporarse a este programa con el fin de acceder las escrituras propietarias del suelo que habitan.
El programa ya alcanzó avances significativos en barrios como Barranquitas Oeste, Villa del Parque, Santa Rosa de Lima, Roque Sáenz Peña y Estanislao López, donde se registra un promedio de más del 84% de los lotes ya formalizados.
La Ordenanza Municipal N° 11.631 da el marco normativo para el despliegue del Plan de Regularización. Así, el gobierno municipal, desde la Agencia Santa Fe Hábitat, comenzó a trabajar en el orden de la situación parcelaria y dominial de los diferentes barrios. De esta manera, se elaboraron los correspondientes planos de mensura y subdivisión -encontrándose otros en proceso- para que todas las viviendas tengan una identidad, y en un trabajo articulado con los escribanos se avanzó en la formalización de las escrituras de propiedad para que los vecinos sean los legítimos dueños de su vivienda.
